He tenido una entrevista muy interesante con un taxista que hablaba un poquitín de inglés y que se llamaba Vaclav. Me ha comentado que los precios en Kiev están subiendo estrepitosamente, de 50kopeks a 2 gridnas (que son unos 20 cents) por billete de metro. No acaba de tener muy claro cómo ha ganado el nuevo presidente Yanuchenko que todos conocemos por su período previo a la revolución naranja. Le preocupa lo drástico que es con las leyes y su nueva propuesta de constitución.
Por otro lado, Kiev es una ciudad que tiene censados dos millones y medio de habitantes y otros dos millones y medio sin censar. Es un caos de tráfico y de infraestructuras. El alquiler medio de un apartamento es de 3000 gridnas y la prestación por desempleo es de 1000 gridnas mensuales. La construcción parece ser el negocio actual y muchas compañías extranjeras se dejan ver en este sector.
Vaclav ha aprendido inglés solo. Me comenta que empezó a estudiarlo en los años que estuvo en la armada rusa pero que como parecía no interesarle a nadie pues se suspendieron las clases y tuvo que continuar el aprendizaje por su cuenta.
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