lunes, 12 de agosto de 2013

Arraiolos


Pueblo de casas blancas con una imponente alcazaba que lo domina y a la que es mejor acceder en coche. Una parada breve en la pastelaria para tomar de nuevo un buenísimo café Delta y creo el mejor pasteis com natas que he probado (sin despreciar los de Belén, en Lisboa). Paseamos por las calles cuyas tiendas están a punto de abrir. Son las 10.00 y empiezan a llegar coches llenos de alfombras típicas de Arraiolos. Me compro una pequeña, para aumentar la colección, aunque esta será la primera que cuelgue en la pared. Es azul y blanca, del tipo Santo Antonio, e incluye cuatro animales que bien pueden ser conejos o perros. La compra en el super del pueblo es otra visita turística con productos muy curiosos y típicos, y precios bajísimos