viernes, 6 de noviembre de 2015

D'Albertis y el mundo

En una de las colinas de Genova se encuentra un antiguo castillo reformado que fue hogar y centro de estudio de Enrico d'Albertis, uno de los grandes exploradores y viajeros italianos del finales del siglo XIX. Transformó unas ruinas en un verdadero castillo en el que ubicar todo aquello que traía de sus viajes por el mundo y disponer de espacio suficiente para construir maquetas, meridiani (relojes solares) y otras muchas cosas. Dispone, probablemente, de una de las más completas bibliotecas de viajes y países, geografía y mapas, que existen. El Castello d'Albertis es ahora sede del Museo de las Culturas del Mundo.
Navegante, escritor, etnólogo y naturalista, fue el fundador del primer Yatch Club italiano en 1879 y, a bordo del Violante y el Corsaro realizó la ruta de Colón hasta las Américas siempre guiado por instrumentos náuticos que él mismo se contruyó. 

Más tarde daría la vuelta al mundo tres veces siempre utilizando diferentes medios de transporte: barco, camello, caballo, tren, hidroavión, entre otros. De todo ello dejó mucho material fotográfico y varias obras escritas.


 El cronista Caffaro escribía sobre él:

"Il capitano d'Albertis... è una delle più belle figure di marinaio che io m'abbia conosciuto. Era vestito in tal modo, d'una giacca di pelle di foca e con la berretta di lana, una giornata di neve in cui, abbattuto dal ventoe assiderato dal freddo, mi ospitò a Monte Galletto [località in cui sorge tuttora il castello]. Grande, magro, la pelle abbronzata dalle lunghe crociere, la barba folta ed ispida, i capelli abbandonati in una simpatica noncuranza, folte le sopracciglia alla cui ombra brillano due intelligentissimi occhi."